Bomba de vacío: Un punto clave tras una cirugía de próstata.

¿Podemos decir que la Bomba de vacío supone un punto clave tras una cirugía de próstata? ¿Es la Solución médica para diferentes enfermedades?

Parece ser que las bombas de vacío son la primera opción de tratamiento según múltiples estudios efectuados por especialistas de distintos países. Estos aseveran que tiene beneficios médicos muy positivos para la impotencia. Esta se define como una incapacidad continua para lograr tener o bien sostener una erección. De esta forma es difícil que se pueda tener una relación íntima calificable como satisfactoria.

Las bombas de vacío son realmente útiles para lograr tener una erección y prosperar adecuadamente en el desempeño sexual. Otro de sus puntos fuertes es que se puede emplear a pesar de que el paciente pueda presentar otros inconvenientes subyacentes de salud. En cuanto a los tipos de Bomba de vacio las hay manuales o bien eléctricas. Las dos vienen con unos anillos de constricción con los que se puede sostener la erección. La recomendación médica es que se quite este anillo tras la relación íntima o bien antes que pase media hora.

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Bomba de vacío tras la operación de próstata

Este dispositivo está avalado por la UE para la rehabilitación tras una prostatectomía. Coopera en la rehabilitación y en preservar la capacidad de lograr una erección. Su óptimo funcionamiento se debe a que ejercita una presión negativa dentro del aparato llenando de sangre los cuerpos cavernosos, lo que provoca en último término una erección. Y es que existen muchos tratamientos para la disfunción eréctil, pero la bomba de vacío ha tomado su espacio.

Se señala especialmente su uso en:

– Pacientes que no responden a fármacos por vía oral.

– Pacientes que al tomar los fármacos orales tienen efectos secundarios como cefalea.

– Pacientes para los que los fármacos orales están desaconsejados.

– Para rehabilitar el pene tras una cirugía de próstata por cáncer.

La bomba al vacío es un tubo plástico con una apertura por donde se introduce el pene, y al otro lado se absorbe para completar el pene de sangre y que se genere la erección. Entonces se pone un anillo en el leño del pene para sostener la erección, la que no debe pasar de media hora. Estas bombas son seguras y pueden ser utilizadas por pacientes con disfunción eréctil de cualquier origen.

Para ciertos pacientes la bomba es un tratamiento de segunda línea, mas para otros es de primera, en dependencia de la causa de la disfunción. La mayor parte de los pacientes se hallan satisfechos con el empleo de este dispositivo tras unos días de aprendizaje. Conforme estudios, la tasa de satisfacción es de en torno al sesenta y cinco a ochenta por ciento. Entre los efectos secundarios que puede generar la bomba se hallan hematoma en el pene, minoración de la fuerza de la eyaculación, edema de la piel del pene y adormecimiento transitorio del pene. Por eso es importante seguir bien las indicaciones.

En ciertos pacientes hay que tener cautela con el empleo de la bomba, o bien aún a veces no se aconseja su uso. Es el caso de hombres con antecedentes de priapismo, pacientes que tienen trastornos de coagulación y los pacientes que emplean anticoagulantes orales, entre otros muchos.

La Bomba de vacio, no obstante es apreciada en muchas ocasiones para la disfunción eréctil ocasionada por Diabetes, Hipertensión y enfermedades cardiovasculares, Operación de la próstata, Enfermedades vasculares, Infarto de miocardio y accidente cerebrovascular, Alta concentración de lípidos en sangre, Depresión o bien otros trastornos psicológicos.

De qué manera emplearla

En la terapia de vacío, la erección se logra con una presión negativa, esto es, creando vacío en el tubo que rodea el pene. A través de el vacío generado la sangre fluye con más intensidad a los cuerpos cavernosos ocasionando la erección o bien la rigidez del miembro de una forma mecánica y sin precisar fármacos. Es más cómodo afeitarse la zona ya antes del empleo.

Para un buen sellado entre el tubo y la piel es recomendable humidificar la zona con un lubricante de base agua.

Mejora la capacidad de erección y trabaja la reducción de una posible incontinencia tras la intervención quirúrgica. También es un dispositivo médico de ayuda para la rehabilitación y conservación de la capacidad de erección tras prostatectomía así como intervenciones en la pelvis menor. Ya he dicho anteriormente que genera una presión negativa dentro del tubo en torno al pene y es por eso que los cuerpos cavernosos se llenan de sangre provocando la rigidez del miembro. Estas erecciones son de relevancia esencial para la rehabilitación o bien conservación de la capacidad de erección.

Algunas Contraindicaciones

Este producto está desaconsejado para pacientes con anemia de células falciformes, leucemia, tumores medulares o bien otras enfermedades que tienen como resultado una modificación de la coagulación y provocan una prolongación de la erección.

Limpieza

Puede limpiarse de manera fácil con agua templada y jabón suave. Para esto debe eliminarse el cabezal de bomba del tubo.