Analizando el mercado inmobiliario en Colombia nos encontramos con que, por ejemplo, Barranquilla es hoy uno de los destinos más atractivos para la inversión inmobiliaria debido a factores como el mejoramiento de su calidad de vida, y los procesos de transformación y planificación urbana que tienen al río Magdalena como el mayor detonante. También la extensa oferta de residencias en estratos cinco y seis con diseños arquitectónicos, materiales, y estándares internacionales, a unos costos por metro cuadrado inferiores a los que rigen en urbes de igual desarrollo. Una de las opciones más de actualidad es el comprar finca en Rionegro.
La capital del Atlántico recibe a migrantes singularmente de la ciudad de Bogotá y de otras de la zona Caribe, que han venido a establecerse en ella atraídos por su desarrollo actual y por el proyectado a corto y mediano plazo. Razones les sobran pues en la última década Barranquilla ha sido ejemplo a nivel nacional en reducción de la pobreza, la que bajó del cuarenta y tres por ciento al veinte.
También es importante el indicador de generación de empleo, que multiplicó por uno con cuarenta y tres, cuando urbes como Bogotá, Medellín y Cali estuvieron bajo uno con treinta y cinco o bien uno con veintiséis. En los últimos diez años Barranquilla fue la urbe que más consiguió acrecentar el ingreso promedio por hogar. Y si bien en ese indicador todavía está bajo la capital del país, va camino a reducir sustancialmente dicha brecha puesto que la urbe sube a una tasa del ocho por ciento anual, al paso que Bogotá lo hace al cuatro por ciento y Medellín al tres por ciento.
¿Por qué razón adquirir residencia en Colombia en dos mil diecinueve?
Tras la tempestad propia de un año de elecciones y superando ciertas incertidumbres económicas, Colombia se prepara para tiempos de calma en el desempeño de las inversiones y los negocios en este dos mil diecinueve. Colombia ofrece grandes perspectivas para el inversor nacional y extranjero que la transforman en un enorme foco de desarrollo y también inversión en la zona
La economía colombiana está en constante proceso de expansión. La última década ha visto indicadores económicos muy saludables, firma de tratados de libre comercio y mejoras en infraestructura, innovación y acceso a tecnología. Para los especialistas esta expansión tiene un extenso margen de desarrollo en los próximos diez años. Esto ha supuesto que los índices de pobreza hayan descendido significativamente y que el consumo interno haya sostenido el desarrollo económico.
En los últimos tiempos la depreciación ha hecho que adquirir residencia nueva en Colombia sea una inversión rentable.
¿Y qué hay de la inversión inmobiliaria en Colombia para dos mil diecinueve?
Primero hay que decir que invertir en un inmueble es de las mejores resoluciones financieras que puedes tomar. Esto no solamente te deja acrecentar tu patrimonio, sino adquirir una residencia que te da seguridad, aumenta tus opciones y te deja concentrarte mejor en otras metas que tengas a futuro.
Asimismo hay que tomar en consideración que la clase media en Colombia viene en ascenso, lo que ha significado un impacto positivo en los costos de la finca raíz y un apogeo en la industria de la construcción.
El dos mil diecinueve va a ser el año de la consolidación económica en Colombia, y los especialistas aseguran que el campo que impulsará este desarrollo va a ser la construcción, si bien todos y cada uno de los ámbitos van a tener crecimientos positivos.
Si a esto agregamos las bajas tasas de interés para crédito hipotecario y una inflación que seguramente acabará el año con un índice más bajo, hay un escenario conveniente para la inversión en finca raíz en dos mil diecinueve.
En construcción, vamos a ver dinamismo en obras civiles y residencial de estratos medios y bajos, en especial. En el caso de la ciudad de Bogotá, la capital colombiana es una plaza de alta valorización donde el dos mil diecinueve está siendo un año de restauración para la residencia nueva. Acá se pueden hallar opciones de inversión en finca raíz de múltiples tamaños y presupuestos, una fuerte inversión en infraestructura, un alto déficit habitacional y una genial conectividad con otras grandes urbes del planeta.
Arkadia se conecta con sus vecinos
Un nuevo vecino llega para quedarse y conquistar a los habitantes del occidente de Medellín: Arkadia.
El centro comercial que va a abrir sus puertas en el último trimestre de dos mil diecinueve y que promete transformarse en el punto de encuentro de los vecinos de Belén, La Mancha, El Rodeo, Lauros e inclusive de los ayuntamientos de Itagüí y Envigado, sin dejar de hilar nudos con el resto de la urbe.
Novedades que impactan
Además de esto, y merced a su diseño moderno y también renovador, tipo estadio, los visitantes van a poder visualizar como una enorme panorámica los más de ciento sesenta conceptos comerciales distribuidos en sus 5 niveles. Va a contar con las marcas ancla Falabella y Cinemark, que van a llegar por vez primera a esta zona de la ciudad de Medellín, y Euro Supermercados, y otras reconocidas como Ktronix, Tugó, Miniso, Crepes & Waffles, Smart Fit, Adidas, Studio F, Ela, Chef Burger, Frisby, Il Forno, Punto Blanco, Gef, Baby Fresh, Play time, El Corral, Koaj, iShop, Offcorss, L´occitane, Bancolombia, Juan Valdez Café, entre otras muchas. De manera adicional, va a contar con 2.400 aparcamientos, extensas áreas para parking de bicis, rampas exprés y vías de desaceleración propias para eludir congestiones en la carrera setenta y en la avenida ochenta.
Y las novedades prosiguen, puesto que la plazuela de comidas va a tener una terraza con avistamiento a la urbe.
¿Dónde se encuentra la residencia de alto perfil en la urbe?
Los edificadores de residencia aseguran que invertir en inmuebles de alto perfil es una tendencia creciente, y consideran al departamento de Antioquia como una de las zonas más afianzadas para esta clase de negocios.
¿Instante para adquirir?
Este año es ideal para aquellas personas que piensan en adquirir un inmueble nuevo, merced a las condiciones positivas del mercado. En la actualidad, los futuros compradores cuentan con las tasas de créditos hipotecarios más bajas de los últimos tiempos.
Existen cuando menos 4 opciones alternativas de inversión a las que se pueden acceder. La primera de ellas es un sistema de financiación colectivo que se hace a través de plataformas digitales, conocidas asimismo como ‘crowdfunding’.
En promedio una persona puede participar en un crowdfunding inmobiliario desde 50 millones. Probablemente hay ocasiones más asequibles o bien más costosas. Para participar en un ‘crowdfunding’ inmobiliario, es esencial tener unos mínimos conocimientos económicos del campo, y, sobre todo, de la reglamentación pertinente para cada género de proyecto en el que se pretende participar. Hoy en día abundan este género de plataformas en la red con proyectos localizados en diferentes países.
Otra opción alternativa son los fondos de inversión colectiva inmobiliaria. En estos las personas pueden conformar un conjunto en el que todos aportan una determinada cantidad de dinero para su siguiente inversión en un inmueble.
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